Austin, Texas. – El fabricante de vehículos eléctricos Tesla Inc. reportó este martes una caída del 71 % en sus beneficios netos correspondientes al primer trimestre de 2025, alcanzando los 409 millones de dólares, en comparación con el mismo período del año anterior. La drástica disminución se produce en un contexto de descenso de ingresos en el sector automotriz y aumento de gastos operativos, según informó la propia compañía.
Ingresos en descenso y presión sobre los márgenes
Entre enero y marzo, los ingresos por ventas de automóviles de Tesla cayeron un 20 %, situándose en 13.967 millones de dólares. En total, sus ingresos globales, que incluyen servicios energéticos y otros productos, se redujeron en un 9 %, alcanzando los 19.335 millones de dólares.
Asimismo, el EBITDA ajustado de la compañía cayó un 17 %, quedando en 2.814 millones de dólares, mientras que el margen operativo se redujo al 14,6 %. Los gastos operativos aumentaron un 9 %, hasta los 2.754 millones de dólares, presionando aún más los resultados financieros.
Resultados por debajo de las expectativas
A inicios de abril, Tesla ya había adelantado que sus ventas globales de vehículos descendieron un 13 % en el primer trimestre, totalizando 336.681 unidades. Sin embargo, los resultados oficiales publicados esta semana fueron incluso peores de lo anticipado por los analistas, quienes proyectaban ganancias por acción de $0.39, frente a los $0.27 anunciados, así como ingresos totales por encima de $21.000 millones.
Competencia creciente y contexto político
La compañía enfrenta una intensa competencia internacional, particularmente de fabricantes chinos de vehículos eléctricos, lo que ha resultado en una reducción de su cuota de mercado en mercados estratégicos como Europa y Asia.
El desplome de las ganancias también se produce en un contexto político notable: su director ejecutivo, Elon Musk, se ha convertido en una figura clave dentro del nuevo Gobierno estadounidense, liderado por el presidente Donald Trump. Musk actualmente dirige el Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE), un órgano creado para reducir el gasto público federal en billones de dólares, una misión que ha generado controversia y polarización.