Washington – El Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos (DHS, por sus siglas en inglés) anunció este lunes un nuevo programa que ofrece asistencia financiera para facilitar la salida voluntaria de inmigrantes indocumentados, incluyendo un estipendio adicional de 1.000 dólares para quienes decidan autodeportarse.
La medida, que forma parte de la nueva política migratoria impulsada por la administración del presidente Donald Trump, busca fomentar retornos voluntarios como alternativa a los procesos de detención y deportación forzosa ejecutados por el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE).
“El objetivo es brindar una salida digna, segura y económica a quienes se encuentran ilegalmente en el país”, indicó el DHS en un comunicado. El apoyo económico será canalizado a través de CBP Home, una versión renovada de la aplicación CBP One, lanzada originalmente durante la administración de Joe Biden.
Los inmigrantes que opten por esta vía recibirán la ayuda tras confirmar su regreso al país de origen. El programa ya ha sido utilizado con éxito por al menos un ciudadano hondureño que viajó desde Chicago a Honduras, y se han reservado más boletos para las próximas semanas, precisó el DHS.
Los participantes que se inscriban formalmente en CBP Home dejarán de ser prioridad en las redadas del ICE, siempre que demuestren avances concretos hacia su salida voluntaria. Además, podrían conservar la posibilidad de solicitar un reingreso legal a EE. UU. en el futuro.
La secretaria de Seguridad Nacional, Kristi Noem, defendió la iniciativa como una estrategia que beneficia tanto a los migrantes como al erario público. “La autodeportación es la mejor manera, la más segura y la más económica de salir de Estados Unidos y evitar que lo arresten”, declaró.
Actualmente, el proceso completo de arresto, detención y expulsión de un inmigrante indocumentado cuesta al Estado alrededor de 17.121 dólares. En comparación, el programa de autodeportación representa un ahorro del 70 % para los contribuyentes, según datos oficiales.
El presidente Trump, por su parte, destacó que este nuevo enfoque busca ordenar el sistema migratorio sin recurrir exclusivamente a medidas coercitivas. “Vamos a pagarles cierta cantidad de dinero y conseguirles un hermoso vuelo de regreso. Si hacen todo bien, quizá algún día puedan regresar si son buenas personas”, expresó ante periodistas desde la Oficina Oval.
El anuncio se produce en medio de una intensificación de las acciones migratorias de la actual administración, que ha prometido ejecutar la campaña de deportaciones más grande en la historia del país, lo que ha generado fuertes críticas por parte de organizaciones pro-inmigrantes y sectores de la oposición.