Moscú.– El presidente ruso, Vladímir Putin, propuso este domingo a Ucrania reanudar negociaciones directas sin condiciones previas el próximo 15 de mayo en Estambul, con el objetivo de encontrar una salida pacífica a más de tres años de guerra.
Durante una comparecencia transmitida en directo desde el Kremlin, Putin subrayó: “Estamos decididos a negociaciones serias con Ucrania. Su sentido radica en eliminar las causas originales del conflicto, lograr una paz duradera y sólida a largo plazo”.
Putin destacó que las negociaciones deberían retomarse en Estambul, ciudad donde se interrumpieron los diálogos en marzo de 2022. También expresó su esperanza de que el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, facilite el encuentro y reafirme su compromiso con la paz.
Reacciones y contexto
El Kremlin afirmó que ahora espera la reacción del Gobierno ucraniano. El mandatario ruso dejó abierta la posibilidad de alcanzar una tregua real y respetada por ambas partes como primer paso hacia un acuerdo de paz, pero recalcó que la iniciativa depende de Kiev y de sus aliados occidentales.
Por su parte, el presidente estadounidense Donald Trump afirmó recientemente que sin una negociación directa entre Moscú y Kiev, su mediación será inútil.
No obstante, los puntos de vista entre ambos países siguen siendo irreconciliables, en particular por la exigencia de Moscú de reconocer los territorios anexionados, incluido Crimea, algo que el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, rechaza tajantemente.
Además, el vicepresidente estadounidense J.D. Vance opinó esta semana que Rusia “pide demasiado”, considerando que ni siquiera controla completamente las regiones que reclama, como Donbás, Jersón y Zaporiyia.
Sin respuesta clara a la tregua de 30 días
Putin no respondió de forma directa a la propuesta de una tregua de 30 días planteada este sábado por los líderes de Alemania, Francia, Reino Unido y Polonia. En su lugar, acusó a Kiev de haber violado varias treguas anteriores y denunció nuevos ataques ucranianos, incluyendo el lanzamiento de 524 drones contra territorio ruso, lo que causó interrupciones masivas, particularmente en el tráfico aéreo de Moscú.