Santo Domingo. – La reciente depreciación del peso dominicano frente al dólar no constituye un indicio de crisis cambiaria, sino un ajuste normal dentro del actual entorno de política monetaria expansiva, afirmaron economistas consultados por este medio.
El economista Miguel Collado explicó que este comportamiento es resultado de decisiones adoptadas por las autoridades monetarias, como la liberación de RD$83,000 millones del encaje legal y otras facilidades que han elevado la liquidez en circulación. “Estas medidas incrementan la cantidad de pesos en el sistema financiero, lo que ejerce una presión natural sobre el tipo de cambio”, indicó Collado.
El especialista recordó que este fenómeno no es nuevo, pues ya se ha presentado en ciclos anteriores. “En marzo del año pasado, cuando se aplicaron políticas restrictivas, el peso se apreció. Ahora, bajo un esquema de estímulo crediticio, es esperable una leve depreciación”, puntualizó.
Por su parte, el economista Alejandro Grisanti sostuvo que, pese a la reciente variación, el peso dominicano sigue mostrando fortaleza relativa y que incluso podría estar ligeramente sobrevalorado. Apoyado en modelos de equilibrio cambiario como el Índice Big Mac y las estimaciones de su firma Ecoanalítica, Grisanti ubicó el valor justo del dólar entre RD$64.90 y RD$69.00.
“Permitir cierta corrección del tipo de cambio es saludable para la economía, ya que mejora la competitividad de las exportaciones y reduce distorsiones en el aparato productivo nacional”, afirmó Grisanti. “No estamos frente a un fenómeno de preocupación, sino ante un ajuste gradual dentro de márgenes razonables”.
Ambos economistas coincidieron en que no existen factores externos que estén ejerciendo presión sobre el tipo de cambio en estos momentos. Por el contrario, señalaron que el dólar se ha debilitado en los mercados internacionales, las tasas de interés globales permanecen estables y la República Dominicana mantiene reservas internacionales en niveles históricamente altos, lo que refuerza la confianza en la estabilidad cambiaria.
En conclusión, los expertos recomiendan mantener la calma y no alarmarse ante la variación observada en el tipo de cambio, ya que responde a mecanismos internos esperados, dentro del marco de una política monetaria orientada a estimular la economía nacional.
