Brasilia.– El expresidente de Brasil Jair Bolsonaro (2019-2022) fue puesto bajo prisión domiciliaria este lunes por orden del juez de la Corte Suprema Alexandre de Moraes, tras considerar que violó de forma reiterada la prohibición de usar redes sociales en el marco del juicio que enfrenta por una presunta intentona golpista tras las elecciones de 2022.
La medida implica que Bolsonaro deberá permanecer confinado en su residencia de Brasilia, sin visitas salvo autorización previa y con la prohibición de utilizar teléfonos, propios o ajenos. Durante un operativo en su domicilio, la Policía Federal incautó varios dispositivos electrónicos.
Incumplimiento de medidas cautelares
Desde mediados de julio, el exmandatario estaba sometido a restricciones que incluían el uso de un brazalete electrónico, limitaciones de movilidad nocturna y los fines de semana, y la prohibición de comunicarse en redes sociales directa o indirectamente.
Según Moraes, el líder de la derecha brasileña violó nuevamente esta restricción al aparecer en un video divulgado por su entorno durante manifestaciones en su apoyo realizadas el domingo en varias ciudades del país. En las imágenes se lo veía conversando con su hijo mayor, el senador Flavio Bolsonaro, en un acto en Río de Janeiro.
“La justicia no permitirá que un acusado la considere una tonta, creyendo que permanecerá impune por tener poder político y económico”, advirtió Moraes en su resolución.
Tensión política y repercusiones internacionales
El caso se produce en medio de un clima político y diplomático tenso entre Brasil y Estados Unidos. El expresidente Donald Trump, aliado de Bolsonaro, calificó el proceso judicial como una “caza de brujas” y el 30 de julio el Departamento del Tesoro estadounidense impuso sanciones financieras personales contra Moraes, sumadas a la revocación de su visa. Ese mismo día, Trump autorizó aranceles del 50% a sectores clave de exportación brasileña, que entrarán en vigor el 6 de agosto.
El diputado Eduardo Bolsonaro, hijo del exmandatario, acusó al magistrado de “abuso de poder para silenciar al líder de la oposición brasileña” y lo llamó “psicópata descontrolado” en la red X.
Riesgo judicial y futuro político
Bolsonaro, de 70 años, está inhabilitado para competir en elecciones hasta 2030 debido a sus ataques infundados contra el sistema electoral. En caso de ser hallado culpable en el juicio por conspiración, podría enfrentar hasta 40 años de prisión.
Pese a ello, el exmandatario insiste en que espera presentarse como candidato presidencial en 2026, mientras que el actual presidente Luiz Inácio Lula da Silva, de 79 años, ha manifestado su intención de buscar un cuarto mandato si su salud se lo permite.
La decisión de Moraes marca un nuevo capítulo en un proceso judicial que, según analistas, podría redefinir el mapa político brasileño en los próximos años.