Santo Domingo, R.D. – La alta incidencia de polvo del Sahara sobre la isla ha provocado un incremento de pacientes con rinitis alérgicas, procesos infecciosos de las vías respiratorias altas y molestias auditivas relacionadas con la congestión nasal, según advirtió el doctor César Moquete, otorrinolaringólogo de Hospiten Santo Domingo.
Síntomas más frecuentes
El especialista explicó que en las últimas semanas se han registrado en consulta numerosos casos de:
-
Estornudos recurrentes.
-
Mucosidad hialina constante.
-
Obstrucción nasal persistente.
-
Dolor facial repetitivo.
-
Infecciones respiratorias recurrentes.
Moquete señaló que existe una estrecha relación entre el ambiente y las enfermedades ORL, indicando que factores como ruido, polvo y aire contaminado agravan la situación en el contexto actual de partículas del Sahara.
Ruido y contaminación: un factor combinado
El especialista también subrayó que la exposición prolongada al ruido es la principal causa de pérdida auditiva y acúfenos (tinnitus). Estos efectos, sumados a la contaminación ambiental y los cambios de temperatura, favorecen la inflamación de la mucosa nasal y complican el panorama respiratorio.
Riesgos de la automedicación
Moquete advirtió sobre el uso indiscriminado de descongestionantes nasales como la Oximetazolina durante períodos prolongados, ya que pueden causar rinitis medicamentosa, empeorando los síntomas.
Diferencias entre rinitis alérgica y sinusitis crónica
El médico precisó que aunque ambas comparten síntomas como estornudos, mucosidad y congestión, tienen orígenes distintos:
-
Rinitis alérgica: desencadenada por procesos alérgicos.
-
Sinusitis crónica: causada por procesos infecciosos bacterianos, que pueden repetirse hasta cuatro veces al año.
Las complicaciones de la sinusitis crónica incluyen: infección en la órbita, meningitis, osteomielitis, infecciones cutáneas faciales, abscesos de tejido blando e incluso abscesos intracraneales.
En cuanto al tratamiento, explicó que la rinitis alérgica se maneja con antialérgicos y corticoides, mientras que la sinusitis crónica requiere antibióticos junto a medicamentos de control.
Alcance de la especialidad ORL
Finalmente, el doctor Moquete recordó que la otorrinolaringología (ORL) no solo se ocupa de enfermedades de nariz, oído, garganta y vías respiratorias superiores, sino también de cirugías de tiroides, procedimientos oncológicos, plásticos, estéticos y reparadores de cara y cuello.
Con este panorama, exhortó a la población a acudir a consultas especializadas ante síntomas persistentes y a evitar la automedicación, especialmente en el contexto de las nubes de polvo del Sahara que cada año afectan al país.