El esqueleto humano no es una estructura estática, sino que responde a los ritmos internos del organismo. Como una orquesta silenciosa, las células óseas siguen la batuta del reloj biológico, descomponiendo tejido viejo y dando paso a la renovación. Un estudio reciente, publicado en Scientific Reports por investigadores de la Universidad de Surrey y la Universidad de Sheffield (Reino Unido), demuestra que el ciclo circadiano regula específicamente la resorción ósea, proceso clave en la prevención de la osteoporosis.
El reloj biológico y la renovación ósea
El equipo, liderado por la doctora Andrea Darling, analizó a 22 adultos jóvenes sanos en condiciones de laboratorio controladas durante 26 horas. Se tomaron muestras de sangre cada dos horas para medir dos marcadores:
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sPINP: vinculado a la formación ósea.
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sCTX: asociado a la resorción ósea.
Los resultados confirmaron que la resorción ósea sigue un patrón circadiano, mientras que la formación de hueso no mostró variaciones significativas. Esto implica que el cuerpo regula de forma precisa el momento en que descompone el tejido óseo.
Implicaciones para la salud ósea
La doctora Darling explicó que este hallazgo establece un vínculo claro entre ritmos circadianos y resorción ósea, subrayando la necesidad de investigar cómo este mecanismo se altera en personas mayores o con osteoporosis.
La profesora Debra Skene, experta en cronobiología y coautora del estudio, señaló que la desalineación de los ritmos circadianos, frecuente en trabajadores por turnos, podría tener un impacto directo en la densidad ósea y el desarrollo de enfermedades.
El profesor Richard Eastell, especialista en metabolismo óseo, destacó que el protocolo aplicado confirmó que el ritmo de resorción es circadiano, no simplemente diurno, reforzando la evidencia del papel del reloj interno en la salud del esqueleto.
Riesgos de la alteración del sueño
Los autores advirtieron que los cambios en los hábitos de sueño o en los horarios laborales pueden aumentar el riesgo de osteoporosis, ya que interfieren en la sincronización natural del proceso de renovación ósea.
Craig Jones, director ejecutivo de la Royal Osteoporosis Society, valoró este trabajo como un avance clave en la comprensión de la biología fundamental del hueso y planteó nuevas preguntas sobre el papel del sueño y la prevención de la enfermedad.
Un nuevo campo de investigación
Aunque el estudio se limitó a adultos jóvenes sanos, abre la puerta a futuras investigaciones en poblaciones vulnerables, como adultos mayores o pacientes con osteoporosis.
Al confirmar que la descomposición ósea está regulada por el reloj biológico, esta investigación sugiere que el sueño y los hábitos de vida podrían convertirse en factores determinantes en la prevención y el tratamiento de enfermedades óseas.

