El mandatario estadounidense firmó junto a Egipto, Catar y Turquía una declaración que pone fin a la guerra en Gaza y establece un plan de reconstrucción y gobernanza internacional para la Franja.
El Cairo / Jerusalén.– El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, declaró este lunes “tenemos paz en Oriente Medio” luego de firmar en Egipto una declaración conjunta con los líderes de Egipto, Catar y Turquía, destinada a garantizar el acuerdo alcanzado entre Israel y Hamás para poner fin a la guerra en Gaza, tras dos años de enfrentamientos que dejaron decenas de miles de víctimas.
Trump comenzó la jornada con una visita a Israel, donde ofreció un discurso ante el Parlamento (Knéset) junto al primer ministro Benjamin Netanyahu, antes de viajar a Sharm el Sheij, Egipto, para participar en la Cumbre sobre Gaza, que reunió a dirigentes de más de veinte países.
“Se acabó la larga y dolorosa pesadilla de la guerra”, afirmó Trump en Jerusalén, calificando la jornada como “un tremendo día para Oriente Medio”.
El mandatario presentó un plan de 20 puntos que permitió alcanzar el alto al fuego definitivo y la liberación de 20 rehenes israelíes vivos, a cambio de la excarcelación de 1,968 prisioneros palestinos, medida celebrada en ambas partes del conflicto.
Emoción en Israel y Palestina tras el acuerdo
La noticia desató escenas de júbilo en Israel y los territorios palestinos.
En Jerusalén, Einav Zangauker, madre de uno de los rehenes liberados, abrazó a su hijo Matan, de 25 años, en un hospital israelí.
“Matan, mi amor, se terminó la guerra. Tú eres mi vida, eres mi héroe”, dijo entre lágrimas, en imágenes difundidas por el ejército israelí.
En Ramala y Jan Yunis, decenas de palestinos recibieron a los prisioneros liberados entre vítores y abrazos.
“Los prisioneros viven de la esperanza (…) Volver a casa vale todo el oro del mundo”, declaró Samer al-Halabiyeh, uno de los liberados.
Trump, ovacionado durante varios minutos en la Knéset, celebró el alto al fuego como un “triunfo increíble”, asegurando que el acuerdo representa “el amanecer histórico de un nuevo Oriente Medio”.
También instó a los palestinos a “alejarse para siempre del terrorismo y la violencia”, destacando que el plan “abre una oportunidad real para la paz duradera”.
Egipto, Catar y Turquía: mediadores clave
En la cumbre de Sharm el Sheij, Trump compartió protagonismo con el presidente egipcio Abdel Fattah al-Sisi, quien reconoció el papel determinante del líder estadounidense en el fin del conflicto.
“Sabía que el presidente Trump era el único capaz de poner fin a esta guerra”, expresó Al Sisi, quien anunció que Egipto, junto a Estados Unidos y socios internacionales, organizará una conferencia para la reconstrucción de Gaza.
Trump, por su parte, agradeció la colaboración de Catar y Turquía, mediadores junto a Egipto y Estados Unidos, y destacó que “la paz no se alcanza con palabras, sino con acciones concretas que salvan vidas”.
El nuevo plan de gobernanza para Gaza
Aunque el cese al fuego fue ampliamente celebrado, uno de los temas pendientes es la gobernanza futura de Gaza, devastada por la guerra.
El plan estadounidense contempla una fase de transición con la retirada progresiva del ejército israelí, que aún controla un 53 % del territorio, y el traspaso del poder a un comité palestino tecnocrático y apolítico, bajo la supervisión de un organismo internacional temporal dirigido por Estados Unidos.
El proyecto excluye a Hamás, que gobierna la Franja desde 2007, y plantea su desarme total como condición para la reconstrucción y la apertura económica de Gaza.
Mientras tanto, el Ministerio de Salud gazatí, bajo control de Hamás, reportó 67,869 fallecidos por la ofensiva israelí iniciada tras los ataques del 7 de octubre de 2023, en los que murieron 1,219 israelíes, en su mayoría civiles.
Esperanza y desafíos en el terreno
En Gaza, miles de desplazados comenzaron a regresar a sus hogares entre los escombros.
Camiones con ayuda humanitaria ingresaron a través del paso de Rafah, aunque organizaciones locales denunciaron saqueos por parte de personas hambrientas en Jan Yunis.
En la Plaza de los Rehenes de Tel Aviv, el profesor Ronny Edry, de 54 años, resumió el sentimiento compartido por muchos israelíes:
“Es un día hermoso que esperábamos desde hace dos años, aunque también sentimos tristeza por los que no regresan y por los casi 2,000 muertos de la guerra”.
Un nuevo capítulo diplomático
El cierre de la cumbre en Egipto fue interpretado como un triunfo diplomático para Washington, y particularmente para Trump, quien desde su primer mandato promovió acuerdos de normalización entre Israel y países árabes como Emiratos Árabes Unidos, Bahréin, Sudán y Marruecos mediante los Acuerdos de Abraham.
Con este nuevo pacto de paz, el mandatario estadounidense consolida su papel como mediador clave en la región, impulsando una etapa de cooperación regional e inversión internacional en reconstrucción, energía y desarrollo humano.
“Hoy comienza un nuevo capítulo. No hay vencedores ni vencidos, solo un mundo más seguro”, concluyó Trump antes de abordar el Air Force One y cerrar su intensa jornada diplomática.