El Gobierno de Nicolás Maduro amplía los ejercicios militares y civiles ante lo que califica como “amenazas imperiales”
Caracas.– El Gobierno de Venezuela amplió este lunes su plan de defensa integral a otros tres estados del país, con el objetivo de “seguir ejerciendo la soberanía nacional” y fortalecer la capacidad de respuesta militar, civil y policial ante posibles amenazas externas.
La medida forma parte del Plan de Defensa Nacional, impulsado por el presidente Nicolás Maduro, que contempla 27 tareas estratégicas de carácter operativo, logístico y social, orientadas a preparar al país “para seguir ganando la paz”, según afirmaron las autoridades.
“Así iremos cada día hasta que completemos, por estado y por Zona de Defensa Integral, todo lo que son las 27 tareas que se van perfeccionando en el terreno. Venezuela, en perfecta unión nacional, popular, militar y policial, está preparada para seguir ganando la paz”, expresó Maduro durante la transmisión oficial.
Expansión del plan en nuevos territorios
El sábado, el plan fue activado en los estados Anzoátegui, Monagas y Bolívar, regiones clave en el oriente y sur del país. Las actividades incluyen ejercicios conjuntos entre la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB), cuerpos policiales, milicias territoriales y organizaciones civiles, en el marco de la llamada “unión cívico-militar-policial”.
El ministro de Interior y dirigente del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), Diosdado Cabello, explicó que el propósito del plan es fortalecer la preparación del pueblo y las instituciones de seguridad frente a las “amenazas que se ciernen sobre la patria”.
“El enemigo imperialista ha decidido enfilar todas sus armas contra la patria de Bolívar. Por eso, nuestro llamado es a la resistencia activa y prolongada, a mantenernos en ofensiva permanente, defendiendo cada palmo de nuestro territorio”, sostuvo Cabello.
Ejercicios militares y objetivos estratégicos
El ministro de Defensa, Vladimir Padrino López, detalló que los ejercicios se desarrollan en cumplimiento de las 27 tareas del Plan de Defensa, diseñadas para contrarrestar una supuesta “campaña aérea y de desgaste sistemático” atribuida a Estados Unidos, y evitar lo que calificó como una “parálisis estratégica” del país.
Entre las tareas destacadas, Padrino López mencionó:
-
Verificación de las reservas alimenticias en los estados fronterizos y estratégicos.
-
Evaluación de la disponibilidad hospitalaria para atención civil y militar.
-
Uso de radios comunitarias y medios de comunicación locales como instrumentos de defensa informativa.
-
Simulacros de despliegue táctico ante escenarios de agresión aérea o cibernética.
“Estos ejercicios —indicó— buscan garantizar que el Estado venezolano pueda mantener la estabilidad interna y su capacidad operativa ante cualquier intento de desestabilización externa”.
Contexto geopolítico y tensiones con Estados Unidos
El plan de defensa se activa en un contexto de renovadas tensiones entre Caracas y Washington, luego del despliegue de unidades estadounidenses en el Caribe bajo el argumento de combatir el narcotráfico procedente de América del Sur.
El Gobierno venezolano considera estas operaciones como una “amenaza directa” y parte de una estrategia de “cambio de régimen” impulsada por Estados Unidos, mientras que la Casa Blanca sostiene que su presencia en la región busca interrumpir redes ilícitas transnacionales.
Maduro insiste en “unidad nacional”
Desde el Palacio de Miraflores, el presidente Maduro reiteró que Venezuela está en “perfecta fusión popular, militar y policial”, asegurando que el país seguirá ejerciendo su soberanía en el terreno, en el aire y en el mar.
“Nada ni nadie podrá doblegar la voluntad del pueblo venezolano. Esta patria está de pie, organizada y preparada para defender su independencia frente a cualquier enemigo”, enfatizó el mandatario.
Con esta nueva fase del plan, el Gobierno venezolano consolida su estrategia de defensa territorial en al menos seis estados del país, con miras a extenderla progresivamente al resto de las 24 entidades federales, en un momento en que la política interna y externa de Caracas se encuentra marcada por la tensión, la desconfianza internacional y la militarización del discurso oficial.