La hija del “Rey del Pop” acusa a los administradores del patrimonio de pagos indebidos a abogados; ellos aseguran que todo fue legal y parte de los beneficios generados.
Los Ángeles.– La disputa legal entre Paris Jackson, hija del legendario cantante Michael Jackson, y los administradores del patrimonio del artista continúa intensificándose. Según documentos presentados ante el Tribunal Superior de California y obtenidos por la revista People, la joven de 27 años habría recibido 65 millones de dólares en beneficios provenientes del patrimonio de su padre.
“Pocas personas se han beneficiado más del criterio empresarial de los albaceas que la propia demandante, quien ha recibido aproximadamente 65 millones de dólares del patrimonio en beneficios”, señala el texto legal presentado por los abogados defensores de los administradores del legado del artista.
Los documentos también subrayan que esa suma no habría sido posible si los ejecutores hubiesen seguido los procedimientos convencionales tras la muerte de Michael Jackson, ocurrida el 25 de junio de 2009.
Acusaciones de pagos indebidos
El conflicto surgió cuando Paris Jackson presentó una petición formal contra los bufetes de abogados encargados de gestionar la fortuna del “Rey del Pop”, acusándolos de haber realizado pagos indebidos en 2018 por un total de 625 mil dólares.
Según la hija del cantante, ese monto constituyó una “recompensa lujosa” para los abogados que ya percibían honorarios considerables.
Sin embargo, el equipo legal de los administradores rechazó rotundamente las acusaciones, afirmando que la información presentada por Paris es “falsa a propósito”, y que los pagos correspondieron a un “bono por servicios y resultados extraordinarios”.
La defensa de los albaceas
De acuerdo con People, los abogados de los administradores recordaron que en 2010 el tribunal emitió una orden judicial que autoriza a los albaceas a efectuar pagos a los abogados sin requerir aprobación previa del juez.
Dicha medida fue establecida para agilizar la compleja reestructuración financiera del patrimonio de Michael Jackson, que tras su fallecimiento acumulaba una deuda superior a 500 millones de dólares.
En una publicación paralela, E! News indicó que gracias a las gestiones de los administradores, la fortuna del cantante logró recuperarse y transformarse en uno de los patrimonios más lucrativos del entretenimiento mundial, generando miles de millones de dólares en ganancias por regalías, reediciones y derechos de imagen.
Una petición que busca cambiar el precedente legal
La demanda presentada por Paris Jackson busca anular la orden de 2010, argumentando que esta otorga un poder excesivo a los ejecutores y carece de supervisión judicial adecuada.
No obstante, los albaceas consideran que la artista está “atacando indebidamente documentos protegidos” bajo la ley anti-SLAPP de California, la cual protege a las personas o instituciones frente a demandas que buscan restringir su derecho a litigar o expresar reclamos legales.
“Los ejecutores actuaron de acuerdo con la ley y en beneficio directo del patrimonio, permitiendo la estabilidad financiera y las ganancias que hoy benefician a los herederos”, sostienen los abogados en su escrito de defensa.
Un legado millonario y en disputa
El patrimonio de Michael Jackson, valorado en varios miles de millones de dólares, continúa siendo objeto de controversia más de 15 años después de su muerte.
Aunque Paris Jackson, junto a sus hermanos Prince y Blanket, es una de las principales beneficiarias, las diferencias sobre la gestión de los fondos y el pago a terceros mantienen a la familia en constantes conflictos legales.
La batalla judicial entre Paris y los administradores podría tener implicaciones importantes para la administración futura de grandes patrimonios artísticos, al cuestionar los límites de la autonomía legal de los albaceas frente al derecho de supervisión de los herederos.
En síntesis, mientras los abogados de los ejecutores defienden su manejo financiero y recuerdan los beneficios que Paris ha recibido del patrimonio de su padre, la joven insiste en que la transparencia y la justicia deben prevalecer, incluso dentro del legado del artista más influyente del siglo XX.