El mundo de la música latina se viste de luto con la partida del legendario pianista y compositor Eddie Palmieri, quien falleció este miércoles a los 88 años. Su legado, forjado a lo largo de más de seis décadas, queda inscrito en la historia como uno de los grandes arquitectos de la salsa: un innovador que rompió moldes con su estilo único y su visión artística.
Aunque nacido en Estados Unidos, Palmieri mantuvo siempre un vínculo profundo con sus raíces caribeñas. Su formación musical estuvo marcada por el vibrante Nueva York de los años 50, donde el jazz, el mambo, el boogaloo y los ritmos afrolatinos se mezclaban en una efervescencia cultural sin precedentes. Desde joven, demostró un talento excepcional al piano, ganándose rápidamente un lugar entre los músicos más destacados de su generación.
Un vínculo con Pacheco que marcó la historia
En sus inicios, Palmieri coincidió con Johnny Pacheco en The Chuchulucos Boys, un grupo de mambo que funcionó como cantera de grandes talentos. Palmieri asumía el piano, mientras Pacheco alternaba entre la percusión y la voz. Esa etapa temprana selló una relación musical que, aunque no estuvo exenta de tensiones, sería clave en la gestación de lo que hoy conocemos como salsa.
En 1959, el destino los reunió nuevamente en La Duboney, la orquesta dirigida por Charlie Palmieri, hermano de Eddie, donde Pacheco se desempeñó como flautista y arreglista. Sin embargo, las diferencias creativas pronto salieron a flote: mientras Pacheco buscaba un sonido más popular y bailable, los Palmieri apostaban por propuestas más complejas y arriesgadas.
La separación fue inevitable. Pacheco decidió trazar su propio camino, que lo llevaría a fundar junto a Jerry Masucci el mítico Fania Records, sello que revolucionó la música latina al reunir a las máximas figuras de la salsa bajo un mismo estandarte.
Palmieri y las Fania All-Stars
Aunque Eddie Palmieri nunca formó parte oficial del catálogo de Fania, debido a su contrato con otro sello, fue invitado como artista especial en momentos clave de las Fania All-Stars. Su participación en conciertos históricos como Live at The Red Garter (1968), Live at The Cheetah (1971) y la legendaria presentación en el Yankee Stadium en 1973 dejó claro que su aporte al género era incuestionable.
Bajo la dirección de Pacheco, Palmieri brillaba con su energía desbordante al teclado, su irreverencia musical y su capacidad para fusionar el jazz y la música afrocubana, aportando un sonido poderoso y siempre innovador.
Un legado que trasciende generaciones
Más allá de los escenarios y las grabaciones, Eddie Palmieri deja una escuela musical: la de atreverse a experimentar, romper barreras y enriquecer la salsa con nuevas texturas. Su obra es referencia obligada para músicos y melómanos que buscan entender la evolución del género.
Con su partida, la salsa pierde a uno de sus más grandes exponentes, pero su música y su espíritu creativo seguirán marcando el compás de nuevas generaciones.