Santo Domingo.– Jornadas extensas, alta presión por resultados, inseguridad laboral y falta de espacios adecuados para el descanso son algunos de los factores que han disparado los niveles de ansiedad en el trabajo, un fenómeno que preocupa cada vez más en los entornos profesionales a nivel mundial.
La psicóloga Itania María, a través de sus redes sociales, explicó cómo se manifiestan los síntomas más comunes de la ansiedad laboral, muchas veces pasados por alto o normalizados por los trabajadores:
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Leer un correo electrónico varias veces antes de enviarlo.
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Evitar tareas que impliquen exposición o visibilidad.
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Miedo a decir “no” y aceptar más responsabilidades de las que se pueden manejar, por temor a parecer poco comprometido.
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Revisar el trabajo en exceso antes de entregarlo.
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Sobrecarga voluntaria para evitar la posibilidad de fallar.
Una lucha silenciosa
“Aunque nadie lo note, por dentro luchas con la inseguridad y con una voz interna que repite: ‘¿Y si no soy suficiente?’”, expresó la especialista.
María advirtió que la ansiedad se cuela en la vida diaria de los trabajadores, en las reuniones donde ensayan mentalmente cada palabra antes de hablar, o cuando una simple llamada del jefe provoca una reacción desproporcionada, como si se tratara de una emergencia.
Además, señaló que el miedo al rechazo y el estigma social son factores que intensifican el problema:
“¿Qué pensarán mis compañeros si descubren que me siento así? ¿Me verán débil? ¿Me aislarán? Los prejuicios y los estigmas ganan la batalla”, puntualizó.
Consecuencias y tratamiento
La terapeuta indicó que estas dudas llevan a muchas personas a exigirse más allá de sus límites, quedarse horas extras y aceptar cargas excesivas, lo que aumenta el riesgo de agotamiento físico y mental.
No obstante, resaltó que existen tratamientos efectivos, como la terapia cognitivo-conductual, que ha demostrado científicamente su eficacia en el manejo de los trastornos de ansiedad.
Un llamado a la reflexión
Expertos coinciden en que la ansiedad laboral debe ser reconocida como un problema serio dentro de las organizaciones, que no solo afecta el bienestar de los empleados, sino también la productividad y la sostenibilidad de las empresas.
El abordaje temprano, la creación de ambientes laborales más saludables y la promoción de la salud mental son claves para enfrentar esta problemática que, silenciosamente, impacta a millones de trabajadores.