Washington.– La Reserva Federal de Estados Unidos (Fed) anunció este miércoles un recorte de 25 puntos básicos en los tipos de interés, situando la tasa referencial en una horquilla entre 4 % y 4,25 %. Se trata del primer ajuste a la baja desde diciembre de 2024, en un contexto de creciente incertidumbre económica y riesgos a la baja para el empleo.
Divisiones internas en el FOMC
La decisión fue respaldada por nueve de los doce miembros con derecho a voto del Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC), quienes se mostraron favorables a continuar con las reducciones este año. Este consenso anticipa dos recortes adicionales en las reuniones de octubre y diciembre.
No obstante, el voto no fue unánime: seis miembros se opusieron a nuevas bajadas y el recién incorporado gobernador Stephen Miran, cercano al presidente Donald Trump, defendió una rebaja más agresiva de 50 puntos básicos, alineándose con las presiones de la Casa Blanca.
Crecimiento moderado e inflación elevada
En su comunicado, la Fed señaló que la actividad económica se moderó en el primer semestre de 2025, con una creación de empleo más lenta y un ligero aumento del desempleo, aunque aún en niveles bajos.
La entidad mantuvo sin cambios su proyección de inflación en 3 % para este año y 3,1 % para la subyacente, cifras que permanecen por encima de la meta oficial del 2 %. El banco central advirtió que los aranceles de la guerra comercial promovida por el Gobierno Trump ya comienzan a reflejarse en un aumento de precios en algunos bienes de consumo.
PIB: leve revisión al alza
En paralelo, la Fed revisó sus expectativas de crecimiento: el PIB de EE.UU. aumentará 1,6 % en 2025, por encima del 1,4 % estimado en el informe anterior, aunque aún lejos del dinamismo registrado en 2024.
Contexto político
El anuncio se produce en medio de crecientes tensiones entre la Fed y la administración de Donald Trump, que en los últimos meses ha intensificado su presión para acelerar los recortes de tasas con el objetivo de estimular la economía.
Pese a estas divisiones, la Fed reafirmó que sus decisiones buscan garantizar la estabilidad de precios y el empleo en un escenario global incierto, marcado por la desaceleración del consumo interno y las tensiones comerciales.