Entre enero y agosto de 2025, el sector exportó US$1,928.3 millones, reafirmando su liderazgo dentro de las zonas francas
Santo Domingo, 13 de octubre de 2025.– El sector de dispositivos médicos y farmacéuticos reafirmó su papel estratégico en la economía dominicana, al consolidarse como el principal renglón de exportación del país, con un valor de US$1,928.3 millones en el período comprendido entre enero y agosto de 2025.
El anuncio fue realizado por el ministro de Industria, Comercio y Mipymes (MICM), Víctor “Ito” Bisonó, durante su participación en el Power Talk “Leadership in times of AI”, un encuentro organizado por la Asociación Dominicana de Zonas Francas (Adozona) y el Clúster de Dispositivos Médicos y Farmacéuticos (CDMF).
El evento reunió a ejecutivos, autoridades y expertos internacionales, entre ellos Georgi Jekov, vicepresidente senior de Fresenius Kabi MedTech, quien impartió una conferencia magistral sobre liderazgo ético e innovación en tiempos de inteligencia artificial.
“La República Dominicana está escribiendo su propio código en este lenguaje global del progreso. Bajo la visión del presidente Luis Abinader, se ha trazado una hoja de ruta clara para diversificar la producción, sofisticar las exportaciones y abrazar la innovación como fuerza motriz del desarrollo”, expresó el ministro Bisonó.
Liderazgo industrial impulsado por innovación y confianza
Bisonó destacó que la industria de dispositivos médicos y farmacéuticos representa uno de los mayores logros del modelo de zonas francas dominicanas, basado en la confianza de los inversionistas, el talento local y la estabilidad económica del país.
“El liderazgo de la República Dominicana en esta industria no se mide solo por la capacidad de innovar, sino por la visión de hacerlo con propósito, ética e impacto humano”, afirmó el ministro.
En 2024, el subsector exportó US$2,871.7 millones, equivalentes al 33.4 % del total exportado por las zonas francas. Actualmente, 42 empresas multinacionales operan en el país dentro de este régimen, incluyendo reconocidas marcas como Medtronic, Jabil, Fresenius Kabi, Steris, Cardinal Health, Baxter, Becton Dickinson, B. Braun y Medline.
Estas empresas generan alrededor de 33,500 empleos directos y acumulan inversiones superiores a US$1,940 millones, lo que representa el 25 % de toda la inversión en zonas francas dominicanas.
“Detrás de cada cifra hay confianza en nuestra estabilidad, en nuestro talento y en la capacidad del país para innovar con precisión quirúrgica y calidad mundial”, añadió Bisonó.
Un modelo de colaboración público–privada
El titular del MICM también resaltó el papel del Clúster de Dispositivos Médicos y Farmacéuticos, que desde hace nueve años impulsa un modelo de colaboración entre el Estado, la academia y el sector privado.
“Este modelo demuestra que cuando trabajamos en red, la inteligencia colectiva supera cualquier algoritmo”, subrayó el ministro, al destacar que la alianza entre gobierno y empresas es clave para mantener la competitividad del sector en los mercados internacionales.
Un diálogo sobre liderazgo ético y transformación tecnológica
Durante el encuentro, Georgi Jekov abordó los desafíos del liderazgo ético en un entorno empresarial impulsado por la inteligencia artificial, enfatizando la necesidad de equilibrar la automatización con la responsabilidad social.
“La tecnología y la ética deben avanzar de la mano para lograr una evolución industrial inclusiva, resiliente y sostenible”, sostuvo el expositor invitado, en una reflexión compartida por los líderes empresariales presentes.
Entre las personalidades que asistieron al evento se destacaron Claudia Pellerano, presidenta de Adozona, y Yira Pérez, directora ejecutiva del CDMF, junto con representantes del ecosistema de zonas francas, autoridades gubernamentales y empresarios del sector farmacéutico y tecnológico.
Con este desempeño, el sector de dispositivos médicos y farmacéuticos reafirma su condición de motor de crecimiento exportador, contribuyendo significativamente a la diversificación productiva, la generación de empleo de calidad y el posicionamiento internacional de la República Dominicana como hub industrial de alto valor en el Caribe y América Latina.