Un estudio reciente ha encontrado que las personas que consumen una mayor cantidad de alimentos ultraprocesados tienen una mayor probabilidad de mostrar signos tempranos de la enfermedad de Parkinson, en comparación con aquellas que no incluyen estos productos en su dieta.
El análisis, realizado con datos de 42,853 personas y un seguimiento de hasta 26 años, también se centró en los primeros signos no motores del párkinson, como el trastorno del comportamiento del sueño, que incluye movimientos oculares rápidos.
Estos hallazgos sugieren que la dieta podría tener un papel relevante en la aceleración de los primeros síntomas de enfermedades neurodegenerativas como el párkinson.

