Washington, D.C. — Autoridades sanitarias estadounidenses confirmaron la detección de la nueva variante de COVID-19 NB.1.8.1, un sublinaje del virus SARS-CoV-2 relacionado con un reciente repunte de casos en China continental y Hong Kong. La información fue divulgada este 24 de mayo por los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) y replicada por el medio Fox News.
La variante fue identificada en viajeros internacionales mediante el programa federal de monitoreo aeroportuario, una iniciativa que los CDC desarrollan en conjunto con la empresa Ginkgo Bioworks. Las detecciones se registraron en los aeropuertos de California, Washington, Virginia y en la región metropolitana de Nueva York.
Aunque NB.1.8.1 ha sido identificada en menos de 20 secuencias genómicas, su aparición ha encendido las alertas en las agencias de salud pública por su posible vínculo con los recientes brotes en Asia. Por el momento, la variante no ha sido incluida en el panel principal del COVID Data Tracker, pero continúa bajo vigilancia.
Variante de origen asiático con comportamiento moderado
NB.1.8.1 desciende de JN.1, un linaje de la variante Ómicron que sigue dominando el panorama global del virus desde finales de 2021. En paralelo, esta subvariante ha sido detectada también en India, donde las autoridades han reforzado la secuenciación genómica tras repuntes localizados.
Pese a su propagación, los organismos de salud señalan que no hay evidencia de que esta variante cause una enfermedad más grave que otras del mismo grupo. En Hong Kong, se han emitido recomendaciones para el uso de mascarillas en espacios cerrados por parte de poblaciones vulnerables, pero no se han implementado restricciones estrictas.
Situación hospitalaria y vigilancia en EE. UU.
Según la más reciente actualización semanal de los CDC, correspondiente al 23 de mayo, los niveles de hospitalización por COVID-19, gripe y virus respiratorio sincitial (RSV) se mantienen bajos en todo el país. Datos del sistema nacional de vigilancia de aguas residuales también muestran una baja circulación del virus, salvo en Dakota del Sur, donde se ha detectado una mayor carga viral.
Actualmente, la variante LP.8.1, también descendiente de JN.1, representa aproximadamente el 70% de los casos secuenciados en EE. UU., de acuerdo con el informe de los CDC citado por Reuters.
Cambios en las vacunas para la temporada 2025-2026
Ante la evolución del virus, la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) evalúa reformular las vacunas de refuerzo para la próxima temporada. El comité asesor de la agencia estudia una actualización que deje atrás el linaje XBB.1.5, utilizado en refuerzos anteriores, para adaptarse mejor a variantes como LP.8.1 y NB.1.8.1.
La Organización Mundial de la Salud (OMS), por su parte, ha calificado el riesgo adicional de la variante dominante LP.8.1 como bajo, asegurando que las vacunas actuales siguen siendo eficaces contra la enfermedad grave y sintomática.
Se espera que la nueva formulación de vacunas esté disponible antes del otoño de 2025, sujeta a los resultados de ensayos clínicos y a la aprobación de los organismos reguladores.
