Santo Domingo – La economía dominicana atraviesa una clara desaceleración que ya se refleja directamente en las finanzas públicas. De acuerdo con un informe de la Dirección General de Presupuesto (Digepres), los ingresos corrientes del Gobierno en los primeros cinco meses del año apenas crecieron un 1.3%, muy por debajo del crecimiento promedio de los últimos tres años y lejos de la meta gubernamental de aumentar los ingresos en al menos un 8% en relación con 2024.
Entre el 1 de enero y el 25 de mayo de 2025, el Estado recaudó RD$398,551.9 millones, apenas RD$6,786.2 millones más que en el mismo período de 2024. Esto contrasta marcadamente con el 17.2% de crecimiento registrado en igual período del año pasado respecto a 2023, y con el promedio de 13.9% de crecimiento de ingresos durante los últimos tres años.
La baja en las recaudaciones ha venido acompañada de una reducción significativa del gasto de capital, es decir, la inversión pública en obras de infraestructura. Según los datos de Digepres, en los primeros cinco meses de 2025, el gasto de capital fue de RD$45,212.2 millones, un 23.3% menos que en 2024, y también fue 12.2% menor que en 2023, cuando se ejecutaron RD$51,527.1 millones. Este freno en la inversión pública puede estar contribuyendo, a su vez, a la ralentización del crecimiento económico.
El Banco Central de la República Dominicana (BCRD) reportó un crecimiento acumulado del Producto Interno Bruto (PIB) de apenas 2.5% entre enero y abril, frente al 5.5% del mismo período en 2024. En enero la economía creció 2.2%, en febrero 0.7%, en marzo repuntó a 5.4% impulsada por la construcción, pero en abril volvió a desacelerarse con un 1.7%. Aunque el Gobierno proyectaba un crecimiento para 2025 de 4.75%, y el BCRD estimaba entre 4% y 4.5%, recientemente revisó a la baja su pronóstico a entre 3.5% y 4%. El economista Jaime Aristy Escuder advierte que, a este ritmo, el crecimiento real del PIB podría situarse entre 2.5% y 3%, muy por debajo del potencial estimado en 5%.
La Dirección General de Impuestos Internos (DGII), que aporta aproximadamente el 78% de las recaudaciones, no ha logrado cumplir con su meta de ingresos en lo que va de año. En contraste, la Dirección General de Aduanas (DGA) ha reportado ingresos por RD$105,009 millones, un 9.9% más que en 2024 y un 1.3% por encima de la meta prevista. Sin embargo, dado que Aduanas solo representa el 20% de las recaudaciones totales, su impacto sobre el balance fiscal general es limitado.
Aristy Escuder y otros economistas coinciden en que para revertir esta tendencia el Gobierno debe aumentar la inversión pública, impulsar la inversión privada y estimular la demanda externa (exportaciones), además de superar lo que califican como una política monetaria zigzagueante. La falta de dinamismo en la economía y la baja ejecución del gasto de capital plantean serios desafíos para el cumplimiento de los objetivos fiscales y de crecimiento económico del 2025.
La economía dominicana está enfrentando una ralentización que ya impacta seriamente en las recaudaciones fiscales y en la ejecución presupuestaria. Si esta tendencia persiste, el Gobierno deberá revisar su estrategia económica para evitar un déficit fiscal mayor y una pérdida de dinamismo económico en el mediano plazo.