Los Ángeles, EE. UU. – La Policía de Los Ángeles (LAPD) declaró este lunes como no autorizada una protesta que se desarrollaba en el centro de la ciudad, otorgando a los manifestantes un plazo de 10 minutos para desalojar el área. La medida ha intensificado la tensión en el lugar, generando enfrentamientos verbales entre autoridades y participantes.
A pesar del ultimátum policial, una segunda multitud comenzó a desplazarse hacia una autopista cercana, elevando el riesgo de confrontaciones directas con las fuerzas del orden y posibles interrupciones al tránsito vehicular.
Hasta el momento, no se ha confirmado oficialmente el motivo específico de la protesta, aunque se enmarca en un contexto de creciente malestar social y recientes polémicas en torno a políticas migratorias y el despliegue de fuerzas federales en California.
La situación sigue en desarrollo, y las autoridades locales han activado un dispositivo especial de seguridad para prevenir bloqueos viales y garantizar el orden público. Se espera que el LAPD emita un informe oficial en las próximas horas.