Un violento incidente en Rafah, al sur de Gaza, dejó al menos 31 personas muertas y más de 170 heridas mientras una multitud esperaba recibir ayuda alimentaria. Testigos afirman que soldados israelíes abrieron fuego directamente contra los civiles que se acercaban al punto de distribución, a un kilómetro del centro logístico gestionado por una fundación respaldada por Israel.
El Ejército israelí negó disparos contra civiles y aseguró que solo efectuaron tiros de advertencia al detectar movimientos sospechosos durante la noche. Además, difundieron videos desde drones que mostrarían a hombres armados disparando hacia la multitud, aunque estas imágenes no han podido ser verificadas de manera independiente.
La fundación organizadora, con apoyo israelí y estadounidense, afirmó que la distribución se desarrolló sin incidentes y compartió un video en calma, pero el acceso a la zona está restringido para la prensa.
El hospital de campaña de la Cruz Roja en Rafah atendió a 179 heridos, incluyendo mujeres y niños, y recibió a 21 fallecidos, en su mayoría por heridas de bala o metralla. Hasta ahora, no se ha confirmado si entre las víctimas hubo combatientes.
Este suceso es el más grave desde el inicio de este nuevo sistema de distribución de ayuda, que apenas lleva unos días operando, y refleja la tensión y el peligro en medio de la crisis humanitaria.